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4elik239 – :
Un fracaso total de Prada,me arrepiento de haberla añadido a mi coleccion!Esta sin acabar,y no dice nada!Me la eche solo una vez desde cuando la compre y entre que no dura nada y que no llama la atencion en absoluto sus notas sin acabar,seguramente este frasco acabara en el fondo de algun cajon!No la recomiendo!Una decepcion total!
Xeroxxnuud – :
Me causa extrañeza las criticas negativas hacia Prada LaFemme, trabajo en el rubro de la perfumeria con una amplia gama de marcas de lujo y quien mejor que nosotros podemos ser ministros de fe como un estudio de opinion publica que esta fragancia no tiene absolutamente nada que envidiar en calidad a un Chanel, Hermes o Christian Dior, nosotros poseemos un gran margen de clientela y muchos que han deseado conocer nuevas apuestas les hemos ofrecido este perfume, la gran mayoria de los consumidores han regresado conformes con la opcion, ha tenido excelente recepcion y jamas hemos recibido quejas por su calidad, al contrario solo elogios he incluso han vuelto por otro frasco, talvez no todos los gustos se asemejan pues estos pueden variar en subjetividad o quiza el hecho de probar el aroma una vez no es suficiente para formar un juicio al respecto, pero ya compararlo con un Avon u Oriflame me parece un desproposito, con todo respeto les recomiendo le vuelvan a dar una segunda oportunidad porque si bien no es un exitazo de ventas si ha contado con el beneplacito de un publico que conoce de fragancias y estos han dado una valoracion positiva a este producto, saludos!
denis065 – :
Juditcm13, perdona mi atrevimiento pero creo que te confundes.
Cuando la mayoría de críticas hacia este Prada La Femme son negativas y hacen hincapié en que no tiene “personalidad” no están contraponiendo los perfumes opulentos y extravagantes como única salida para disfrutar un perfume. Prada La Femme no tiene personalidad alguna porque es un aguachirle artificial, con ingredientes de mala calidad vendidos a precio de oro y porque dura un suspiro para lo que parece querer prometer con su lujoso frasco. Es decir, Prada La Femme es una engañifa.
Yo adoro los perfumes ostentosos y narcóticos, pero igual me gustan los suaves y discretos. Simplemente a los suaves les pido que no me engañen y me avisen de que lo son. Este Prada La Femme es un perfume fariseo porque ansía ser otra cosa de la que finalmente es, acaba siendo un perfume intimista a ras de piel, pero él se vende como otra cosa. Tú misma como cliente de perfumes suavecitos y poco invasivos deberías pedir más calidad y honestidad, la que este Prada no tiene.
Un saludo.
vanorik – :
@juditcm13:
Todos los gustos son respetables. Lo que no es ya tan respetable es que ese “gusto” sea una fragancia intercambiable por decenas de otras, que huele como un perfume de Oriflame o Avon y que en cambio, se presenta como una obra “exclusiva” que vale del orden de los 80 €. De nuevo estamos en las mismas. No se está pagando por la calidad, se está pagando por un nombre.
Eso por un lado. Por el otro, como decía Ygor Stravinsky: “el buen gusto es la cosa más rara y mejor del mundo. El mal gusto es también una cosa muy buena. Lo que es imperdonable es la ausencia de gusto”. Y este Prada La Femme está muy cerca de éso. Quiere gustar a tanta gente que es terriblemente indefinido: está, como comentaba otro comentario antes, muy cerca de la nada absoluta. Una fragancia dadaísta. Como “boutade” artística puede tener cierta gracia. Como producto de consumo, no.
div801 – :
No entiendo por qué últimamente se dice tan a la ligera que un determinado perfume no tiene “personalidad”. La personalidad es algo de cada uno, individual, y no porque una fragancia sea más fuerte y extrema que otra tiene que ser mejor.
Parece que las marcas de lujo como Prada, YSL, etc. no pueden sacar perfumes para todas las mujeres, pues TODAS SOMOS DIFERENTES. Quizás hay mujeres (entre las cuales me incluyo) a las que les marea un perfume muy fuerte, esos que vosotros llamáis con “personalidad” y que no pegan con la suya, y por eso sacan estos más sutiles.
Ya os digo que para mi este perfume es de los más fuertes que tengo, y me gusta porque no marea y NO deja indiferente.
Es cierto que el nardo es poco explotado y los olores se mezclan entre sí, pero no por eso este perfume es malo y debemos buscar otros en los que los ingredientes tengan mayor intensidad. Quizás estas sutiles mezclas es lo que le den la elegancia para algunas mujeres.
RESPETEMOS TODOS LOS GUSTOS. Un perfume no es bueno sólo porque sea fuerte, porque pensad que bajo el punto de vista de otra persona será claramente lo contrario.
Le doy un 8.5 a Prada por La Femme.
777ok – :
Prada La Femme cuenta con todas las papeletas para volverse una de las fragancias más intrascendentes, inocuas, olvidables e imperdonables que se hayan lanzado al mercado en la última década, de hecho, en lo que a mi respecta, es potencialmente el peor lanzamiento del pasado 2016.
En primera instancia, la presentación de esta fragancia podría suponer un aroma que dista de cualquier clasicismo actual (Dista de los ya atiborrantes Fruitchouly gourmand, los aceites de Oud y los insufribles “Fresh & light” de los re-lanzamientos aguados) y cierto es, el aroma de La Femme es “relativamente” particular, no obstante, para sus desafortunadas circunstancias, establece esta cualidad como algo inoportuno.
La Femme es nardo con un poco de cera de aveja y especias, sin embargo, estos deben ser las tuberosas más desmotivadas, desalentadoras y contracturadas que pudieron haberse usado, puesto que el habitual matiz floral de la distinta flor blanca se encuentra en su faceta más insípida (Intentado encontrar un perfil aromático que combine lo ozónico con lo animálico, mixtura aparentemente deseada en la actualidad). Todo acompañado por cera y especias cuestionables que se traducirán en el aroma de la más burda y común crema humectante para manos que se pueda solicitar (Nivea, Avon, cualquier marca que deseen imaginar), a esto se le puede incluir un pequeño borde acartonado que recuerda vagamente al cartón de embalaje y un breve desarrollo dulce-limpio del frangipani (Nuevamente, nada destacable). Todos los demás ingredientes en sus desplantes más cacofónicos y tímidos.
La Femme es una fragancia que supera los límites de una fragancia incoherente con los postulados más básicos de Prada (Y vaya que peca de tal cometido), también es una fragancia que ni siquiera puede clasificarse en la categoría de las fragancias simplemente gratas, no obstante, tampoco es debidamente desagradable, es simplemente: Nada, un aroma que fácilmente puede dejar indiferente a cualquiera, aunque eso solo ocurre hasta encontrar la imperdonable etiqueta de precio en conjunto con la presunta “exclusividad” que su circuito comercial le ha atribuido.
La Femme es simplemente una fragancia prescindible, es razón de buscar una fragancia que explore de mejor manera los nardos, pues sugeriría la fragancia debut de Carolina Herrera, Fragile de Jean Paul Gaultier (Entiendo de que esta descontinuada, sin embargo, confío en que Prada La Femme prontamente lo este también), Cabotine de Gres, Michael Kors de Michael Kors, Truth or Dare de Madonna o incluso Radiance de Britney Spears; todas las anteriores están -O estaban- mejor realizadas que La Femme, cuentan con mejores manejos de las materias primas, tienen mejor estela y longevidad (Las que por cierto, son tan mediocres en La Femme como el resto de la fragancia) y naturalmente, son netamente más asequibles que esta desventura que se irá a los antecedentes de Prada con mucha deshonra -Al menos en mi opinión-.
Si desea probar esta pieza pero no esta disponible en su perfumería más cercana, vaya a la farmacia y compre una crema humectante cualquiera, le garantizo que el aroma es idéntico.
Por todo lo anterior, Prada La Femme es no me parece más que un lamentable desperdicio de energía, de materias primas y de dinero.
Amunklee – :
A mi entender solo huele a nardos y muy descafeínados, por cierto, si lo comparamos con otros perfumes en los que el nardo está presente, como el célebre Carolina Herrera, por ejemplo, ( me refiero a su primer perfume femenino). Por lo demás, sillage bajo, duración escasísima pues pasa de las notas de salida directamente a las de fondo, no hay fases, no hay evolución, no hay desarrollo y no hay chispa, es sosísimo, por no haber no hay ni una campaña de narketing en condiciones, basan su estrategia de ventas en el frasco y la marca. La media de edad, pues una mujer de 35 en adelante que le sobra la pasta o que colecciona frascos de perfume. Seguiré buscando vintage de ocasión porque si esto es la alta gama me vuelvo al Nenuco. Quizá el concepto nicho sea ofrecer la calidad de los perfumes de alta gama de los 90 a precios menos democráticos, ahí lo dejo como reflexión.
can902InsuffBooni – :
Lo que esta sucediendo con Prada es el mismo destino que le depara a Jean Paul Gaultier… Una desde la autonomia (Prada) y otra desde BPI (Beauty prestige international) fueron adheridas al contrato Puig en que priorizan lo comercial por sobre la calidad, la verdad que en ese aspecto Prada como marca antes se preocupo mucho mas por el prestigio sobre el marketing lo cual hoy vemos como ha menguado su concepto, es una real pena y decepcion ya que sus principales obras maestras Amber homme y femme talvez se encuentra en proyecto de descontinuacion para dar pie a La femme y Lhomme como sus sucesores de fragancias simbolicas de Prada. Aun no llegan al mercado nacional de Chile y estoy esperando que estos se encuentren en vitrina para dar mi opinion al respecto.
arkan26 – :
¿Qué demonios está pasando con Prada? Pues yo diría que lo mismo que desde hace tiempo pasa con Dior, con Paco Rabanne, con Chanel y con YSL: de ser marcas de lujo, que ofrecían productos de calidad, han pasado a ser marcas anodinas, que se copian unas a otras, que lo único exclusivo que ofrecen son los disparatados precios de las cosas que ponen en el mercado.
Prada y L’Eau Ambré eran creaciones elegantes, depuradas, con un toque de modernidad pero fundamentadas en un sólido clasicismo italiano. Todas ellas compartiendo la nota resinosa-ambarada de fondo como miembros de la misma familia que eran. Candy era una concesión a la moda gourmand, pero hecha con coherencia a los valores de la marca. Luna Rossa era simplemente una horterada, que parecía más propia del Paco Rabanne más macarra que tanto se está prodigando en los últimos años, ésos perfumes que parece destinados a prostitutas adolescentes y a sus chulos. Y ahora vienen con esto: Prada L’Homme y Prada La Femme. Dos productos anodinos hasta el bostezo, de un lujo falso e impostado. El de hombre, un clon de fragancias como Dior Sauvage y Bleu de Chanel, que no destacan precisamente por su calidad. El de mujer, un simple suavizante para la ropa, o crema de manos Avon a las flores blancas si lo prefieren. Éso sí, costando el frasco de los ochenta euros.
Si realmente no les importa gastar ese precio en esto, adelante. Pero tengan por seguro que hay mucho mejores opciones en el mercado. Que con ese dinero podrían haber salido a cenar con su pareja, al cine con las amigas, a comprar unos zapatos nuevos o incluso haber mantenido a una familia de un país en vías de desarrollo por un mes.
Mr. Maxwell – :
Me dejó fría este perfume: olor que ni te llama la atención ni te disgusta. Simplemente un perfume más.
No le veo demasiada personalidad y no comprendo qué exactamente pretende transmitirnos.
En definiva huele a “perfume femenino” genérico sin ton ni son. Desamasiado desafinado dentro de la línea de perfumes de Prada.
LFA – :
Demasiado extraño para ser un perfume cotidiano, demasiado inocuo para lucirse de forma opulenta. Al final se queda en tierra de nadie. Diría de La Femme Prada que es un perfume que ni él mismo sabe qué quiere contar. Es un floral extraño, a veces amargo y muy desbravado, con algunos toques acartonados. En alguna fase huelo a ropa de cama recién estrenada mezclado con suavizante para la ropa un poco más elaborado. Bajo todo esto yace un floral desbravado muy suave. Si Duchamp hubiera creado un perfume probablemente sería algo así. Una cosa iniocua y perezosa. Lo peor es que no se esa su intención, dado que desde el frasco hasta el nombre todo parece querer contar algo interesante. La Femme… vaya por Dios.
Parece un perfume de Hugo Boss, aunque viniendo de Prada, que ni en moda es lo que era hace años, nadie se extraña.
El sillage casi ni existe y la duración, de risa.
Por cierto, ya sé que nunca hay valorar una fragancia por el el segmento de público al que va dirigida, el eterno debate entre nicho y firmas de diseñador, ya que en ambos extremos hay alegrías y decepciones. Pero vaya, que si Prada en la perfumería alguna vez se situó en el sector Diseñador-Nicho fue al principio, cuando todavía su ropa tenía prestigio. Ahora va todo a la par con su perfumería. Algo que vive de épocas mejores.
direkt – :
Visto desde el lado masculino este es un perfume fuerte en estela y longevidad que llega desde un punto olfativo clásico pero adaptándose a los tiempos que corremos, es cierto que puede ser elegante desde el concepto primigenio de clasicismo, pero finalmente resulta muy sofisticado y llamativo dando aires de una autentica vampiresa. Se hace de notar y la discreción no seria su característica .
alibleCahClar – :
Esta fragancia es agradable, completamente floral y medianamente ligera. Me recuerda mucho a Idylle de Guerlain y a Jeu d’amour de Kenzo; creo que un poco más a esta última.
Sin embargo, considero que el precio es un gran problema comparándola con las anteriores.