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ujh706elipseskism – :
No lo conocia,y hoy lo vi por primera vez en una perfumeria que aun tienen a la venta muchos perfumes descatalogados.Aunque sea edt,supera en estela y duracion a muchos edp.Tiene muchisima estela y duracion,es una fragancia con toque amargo especiado y floral muy vintage y potente totalmente ochentero como los que ya no hacen.Le encuentro parecido a Knowing de Estee Lauder.Es realmente una joya con la buena calidad y duracion de los perfumes de antaño de los 80/90.Todo el mundo la olera al pasar por tu lado.Si la encontrais y os gustan los perfumes intensos vintage y arrebatadores dadle una oportunidad ya que realmente es increible realmente maravillosa esta fragancia
KSPalych – :
Compré este perfume por sentirselo a la novia de un primo mío, porque en su piel quedaba un especiado muy interesante, que me recordaba al aroma dulzón, aromático y levemente pincante de la cúrcuma. Un perfume de mucha presencia e indisimulable pero me resultaba totalmente embriagador y seductor.
Cuando me lo compré, me encontré con algunas diferencias. Me gustó, pero me resultó un poco más fuerte que lo que recordaba. Y no llegaba a alcanzar ese aroma especiado que me cautivó. Entonces, un día de casualidad lo mezcle con el Flor de Laranjeira de Natura (porque el Montana declara tener azahar) y quedó una combinación preciosa, agregándole una buena dosis floral al Montana y un fondo más suavecito, cremoso y arropador.
Pero resulta que ahora se vino el otoñi en mi zona, y ahora le vuelvo a sentir esos matices especiados que me obnubilan! No me había dado cuenta de que podía ser el calor del verano el que lo transformara tanto. Ahora se huele más seco, la salida es menos saturadora (en la calidez del verano creo que era la caléndula lo que menos me gustaba de la salida, un nota un poco vegetal), y pienso que eso que me gusta son las notas de cuero combinadas con el incienso, el narciso y la rosa. Personalmente me gusta mucho más con el clima frío, en el que queda un poco más terroso, porque destacan mucho más todas las particularidades de esta fragrancia.
CrywheceReerb – :
CLAUDE MONTANA (París, 1949), el Rey de las Hombreras.
Hijo de padre español y madre alemana. Su educación estricta y autoritaria se reflejó en sus primeros diseños en cuero, negro y corte gillete, donde los modelos parecían esculturas teñidas de punk, tecno y house. Obligaba a sus modelos a no sonreír y a caminar con paso brusco y marcial.
El primero que hizo de sus desfiles un auténtico show, siempre rodeado por su corte de los milagros, vestidos de negro y cuero, que le acompañaban en el París de los 80 y primeros 90 a sus caóticas visitas a las discotecas Le Palace y Les Bains Douches.
Junto con Mugler y Gaultier formaron el triunvirato de la moda en los 80 parisinos.
Casado con su musa y modelo Wallis Franken en 1993 por el único interés de epatar. Los siguientes años fueron la debacle comercial entre drogas y alcohol, que condujeron al suicidio de su esposa y la bancarrota de su casa de modas.
PARFUM DE PEAU fue la primera fragancia de Montana y la más ligada a la esencia ochentera. Yo lo ubicaría en la familia olfativa Chipre Cuero Floral.
Su inicio es un desparrame aldehídico que, aunque no figuren en la ficha, los aldehídos son los que conforman el armazón de esta fragancia como las hombreras enmarcaban sus chaquetones. Poseen tal fuerza y protagonismo que se perciben a lo largo de la vida de este perfume.
Y pasamos a una fase que no se sabe si es floral-cuero o cuero-floral, donde las flores tienen pétalos de cuero y donde el cuero tiene tintes florales.
Distingo especialmente el clavel, los clavos de olor (no declarados), el narciso y la rosa pero de una forma nada dulce y muy animálica. Ahora bien, no se trata de esos efluvios florofecales que tanto me disgustan, sino de unas flores benzoínicas y trementinosas de una potencia y una rotundidad que sólo se pueden llevar caminando a golpes de tacón como sus marciales modelos.
Su fondo es un cuero almizclado con resabios de las contundentes flores anteriores. Es una fragancia en la línea de YOUTH DEW de LAUDER y de OPIUM 1977. No se me ocurren mejores referentes. ¡Ya querría ser yo uno de esos dos perfumones!
PARFUM DE PEAU es un perfume de síntesis; su aroma no existe en la naturaleza y su artificialidad es el secreto de su belleza.
Pyrozhkov – :
Coincido plenamente con las dos reseñas anteriores.
Este perfume de Montaña lo llevaron amigas mías en los 80 y 90. Y siempre me parecio un perfumon.
Es un Chipre- cuero muy seco, ahumado con una rosa especiada con pimienta muy rica y personalísima. Además tiene un toque distintivo original, incisivo, mordiente, por lo que no es fácilmente llevable.
Muy nocturno, queda bien en mujeres moteras, con prendas vaqueras y cazadoras de cuero y con aires de rebeldía y determinación.
Un perfume de pubs y discotecas para seducir, con un cigarrillo en la mano, tomando la iniciativa.
Además sobrevive en la actualidad y tiene una clientela muy fiel. Quien lo lleva, rara vez lo deja de usar para siempre.
Obra maestra de Montana
KiberFOX – :
Vaya con los Montana, una casa que no conocía y me está deparando agradables y sugerentes sorpresas que tengo que agradecer a la generosidad de Bofifa, compañero.
De momento me encuentro con una entrada muy picante de dulces y maduras frutas de invierno, grosellas y ciruelas danzan en mi nariz jugando con jengibre y pimienta que me hacen cosquillas y me divierten.
Pronto la cosa se vuelve seria y una exquisita e intrigante rosa roja aún con resquicios picantes, a la que se incorpora un clavel reventón (caléndula) y un empolvado narciso, nada dulce ni empalagoso, la hacen oscurecer hasta volverla granate y oro como decía ese pasodoble y olé.
Incienso y pachulí, la hacen ahumada, terrosa y madura. No es una rosa inocente y juvenil la que está entre mis manos. Esta rosa se encuentra repleta de experiencia, sabiduría y sensualidad tántrica.
Una nota de cálido ámbar combinado sabiamente con notas animales de un sucio almizcle y un ante muy suave, le otorgan un carácter de terciopelo trémulo y vibrante.
Un floral acuerado suavemente atalcado. Fascinante y lascivo. Un aroma de mujer que se perfuma para élla misma pero que vuelve loco a un hombre, sin siquiera proponérselo. Abstenerse pieles virginales y lechosas que tratan de ocultarse.
Un aroma rico y denso. Muy francés, valiente y rebelde, esta mujer no esconde su sensualidad ni pierde el tiempo con tonterías.
Voluptuoso y muy persistente. Para otoño e invierno. Para noches estrelladas y sábanas de raso. Unisex por la oscuridad de sus flores.
Un clásico soberbio y de gran belleza con la potencia de los 80. Aunque es para toda mujer, si pudiera elegir la piel de este perfume, no sería la blanquecina y decorosa piel de una chica joven, dulce e inocente. Es la piel de una mujer morena, que se deja acariciar toda por el sol. No hay marcas blancas en su cuerpo.
Me imagino a la escultural modelo de los años 80 Grace Jones. Andrógina estrella del Studio 54, hizo sus pinitos como cantante de música disco y actriz, chica Bond, vapuleó como quiso a Schwarzenegger en Conan el destructor.
En aquellos tiempos hacía fotografía de desnudos (no hay manera de agradecer suficiéntemente a mis [email protected] la tabarra que les dí, aunque éstos se apuntaban a un bombardeo) y estaba fascinada por la piel de esta mujer. Decir que no me gustan sus poses agresivas, no encuentro sensual la agresividad, pero tenía una piel perfecta. Morena con reflejos dorados, me la imagino en un desnudo de espaldas, sentada delante de mi Olympus OM-10, con una vista de su cabeza rapada hasta sus gluteos.
Y una gota de este perfume en su nuca que va surcando lentamente cada músculo, cada poro erecto de su piel, deslizándose a lo largo de su columna vertebral hasta llegar a desaparecer en su coxis. Con la sensualidad y elegancia de una pantera negra musculosa y tonificada.
Su botella no me concuerda con el aroma de su interior. Por una parte parece el dibujo helicoidal del ADN. De frente forma la figura de una mujer con formas angulosas, como la Jones y de lado me parece una mujer gestante, una interpretación contemporánea de esas venus paleolíticas, que rendían culto a la fertilidad.
Pura fascinación en una botella….
bexDriece – :
Intoxícate!!! De lo más narcótico del 80’s (y creo que eso ya es decir mucho)
Parfum de Peau tiene esa estructura de los florales chypres de la década, de todos aquellos de los cuales hice mis últimas reseñas, pero le agrega una vuelta distinta, una nota de jengibre-pimienta-almizcle de lo más interesante, una combinación osada y bien lograda.
El jengibre es muy fácil de percibir entre las notas centrales de la fragancia en conjunto con la Rosa. Después diría que viene el cuero y el almizclé (esta última nota es muy prominente los primeros minutos luego de la aplicación, después se va atemperando).
Las frutas y el ámbar hacen de Parfum de Peau un aroma cálido, jugoso.
Sé que es un perfume de cuero, pero a mi entender, la nota de cuero está muy atravesada y transformada por las demás que las rodea. Por ende es un perfume de cuero muy especial.
Esta review esta hecha sobre un eau de toilette de unos 10 años, no tuve posibilidad de probar el vintage.
Recuerdo que fue uno de mis primeros acercamientos a una fragancia de los 80’s, no paraba de olerla me parecia muy interesante su aroma, muy narcotica, claro no es facil de llevar, es especial para una noche rebelde y claramente hay que llevar una prenda de cuero.
volro – :
Los 80 fue una época de excesos perfumisticos, en pleno apogeo de la música Tecno, Punk, cuero y vaqueros rotos, esta década, vio nacer verdaderas bestias odoriferas, llenas de excesos que anunciaban que con cuanta mayor potencia y estela olieras mejor lucias, sobre todo, década en la que se hicieron grandes florales y extraordinarios cueros por las que muchas empresas nicho se darían tortas por tenerlas en sus colecciones.
Parfum de Peau precisamente es una de esas bestias ochenteras, que se desarrolla y evoluciona bajo el concepto de cuero floral, cuero a base de mucha calendula engarzada con rosa y jazmín, un jazmín de efecto animalico que se deja sentir con un contrapunto especiado pero más ahumado por el secado de un potente incienso que se ajusta siempre por debajo de este excelente cuero.
Evolución clásica, con toda la rica escala piramidal de notas y más, porque son muchísimas, se siente profundo, rico, opulento y con un cromatismo similar a la de la bandera gay, bueno superior, porque también esta se quedaría corta en comparación.
Me recuerda mucho y eso que no se parece al mítico Bandit de Piguet o a Rumba de Balenciaga, eso sí, (PdP es menos astringente y alcanforado) será porque en todos estos siento un aura de nostalgia, añoranza e incluso tristeza que envuelve el aroma que me produce aunque sea contradictorio una agradable sensación de bienestar.
Demodé, retro, pero con un aroma potente, exquisito, y lleno de una extraordinaria fuerza.
Completamente sensacional.
Calificación: 9.3
CHIBA – :
Gracias, Chelo 😉
Hace unos días recordé que por mi casa debía danzar una miniatura de Parfum de Peau. No estaba muy seguro de que todavía funcionara, al no ir sellado el tapón de las miniaturas se pican con bastante facilidad. Y qué sorpresa cuando di con ella y comprobé que estaba en perfectas condiciones. La usé en la muñeca y qué alegría me llevé… Ya no hay perfumes así. Obviamente corresponde a su tiempo y tiene marcadas connotaciones ochenteras, trajes de cuero oversize , tacones de charol y la agresiva gráfica del logo de Montana… sin embargo no es un perfume que no pueda usarse hoy sin sentir que vistes una reliquia del pasado, porque ha envejecido muy muy bien.
De primeras como dice Bofifa es abiertamente femenino, sin embargo no pasan ni diez minutos cuando explota la verdadera esencia de Parfum de Peau, un cuero entre áspero y dulzón, sensual y muy vanguardista, con resabios intencionadamente sofisticados, ahumado y extremadamente lujoso, huele realmente caro, a gran almacén de la época o a tienda de lujo como podía entenderse en su momento.
Parfum de Peau es un perfume absolutamente unisex, cueroso, achiprado/sulfuroso e incluso levemente aldehídico que para nada me ha parecido insoportable en su potencia ni fuera de lugar en 2017. Una obra de arte tan interesante como la campaña publicitaria que encuentro igual de inspiradora treinta años después. Qué familia tan interesante la de los cuero femeninos …
netaundully – :
Bofifa y Espartaco…. pero qué bien escribis… ( iba a soltar un taco) . Me encantan vuestras reseñas
Ecoke – :
Qué bonita reseña, Bofifa.
Otro más que se ha perfumado con Parfum de Peau en el pasado, presente!
Recuerdo ser muy pequeño y usarla a escondidas, sin que nadie supiera que me encantaba una fragancia de mujer… ¡de señora! Yo en mi inocencia (tendría como diez u once años, la misma edad en la que robaba toques de La Nuit de Rabanne a la madre de un amigo) sólo sé que la disfrutaba con locura, embriagado y sin parar de pensar “joder, esto es un perfume de hombre”… Más tarde entendí que si bien pueden existir determinadas notas más masculinas o femeninas hay perfumes como Parfum de Peau, Aromatics Elixir, La Nuit de Rabanne (mi favorita y añorada), Cabochard (otro cuero), Alaia y ciertos Poison que son perfumes sin género, opulentos, achiprados, alicorados, suntuosos, aviejados y de una gravedad narcótica, fórmulas atávicas en las que se encierra la animalidad del ser humano, el sexo, sin distinción de genitales. Maravillosa como un coñac caro y nuevo, fuerte y balsámica pero con la luminosidad que le aportaban las flores. Una maravilla con un precioso frasco arquitectónico y onírico al estilo de los ochenta de Mugler y Montana , agresivos e hiperestéticos que bebían de las vanguardias europeas de los treinta y de la rigidez y el brutalismo de las arquitecturas fascistas.
Moshatinpavel – :
Sensual, angulosa, barroca, asertiva, esta fragancia dibuja con nitidez las líneas maestras de lo que era el mundo del perfume en los ochenta, tan hija de su tiempo pero a la vez tan carismática, tan invasiva pero también tan agradable, como una fila de espejos que se enfrentan a sí mismos en un mar de contradicciones.
Se me ocurre la mujer que llevaría esto hoy día: culta, aficionada a leer folletines de finales del siglo XIX, escritora de versos ocultos en horas perdidas, voraz consumidora de cine clásico, refinada en sus gustos, muy femenina, fumadora y apasionada del vino tinto. ¿Podría llevar esto un hombre? Sí, un friki como yo, que se lo pone de vez en cuando porque difícilmente va a poder disfrutar de aromas así en el día a día.
La salida es abiertamente femenina, con explosión de flores blancas y frutas del bosque, aunque hay tantas notas que se superponen unas a otras, con especial protagonismo del cuero -un cuero dulce-, un almizcle muy sucio, y un pachuli terroso, pantanoso como un blues del delta interpretado en una fiesta de etiqueta. La nube que envuelve desde el principio es densa, casi tóxica, se puede cortar con un cuchillo y te va a resultar bastante insoportable a menos que estés acostumbrado/a a este tipo de perfumes; si, como yo, eres un amante del estilo, no te lo podrás ni creer, la proyección de Parfum de Peau es simplemente radiactiva, y en cuanto a la duración, no tiene sentido hablar de ella porque nunca acaba.
Hay dos maneras de posicionarse respecto a este perfume: tratarlo como una caricatura trasnochada de lo que fueron aquellos años tan bien narrados en American Psycho; o bien considerarlo el acento melódico de una década hermosa en el mundo de las fragancias, y vestirlo con orgullo.
Nota: 10/10
Phymmendyd – :
Conocí a dos mujeres que lo usaban. Jamás la olvido. No recuerdo sus nombres ni sus rostro pero el aroma se me quedó impregnado hasta hoy.
Fuerte, pesado, barroco, artificial…
Yo huelo patchouli y pimienta con algo de ámbar y mucho incienso.No registré la flor de azahar, ni la rosa, ni el cuero.
Creo que tiene el estilo del Paloma Picasso: es ochentoso, psicodélico, estridente, anacrónico…No me resulta femenino ni elegante. Tengo la idea de que quien lo adquiere piensa “gastaré un dinero…pues que se sienta!”
Hay fragancias que trascienden el tiempo (las clásicas) y hay otras (como esta) que nacen de la coyuntura y quedan ahí.
VarmepPomnera – :
No es un perfume para esta época. Me encantaba en la década de los ´80. Lo amaba con pasión. Pero hoy los gustos son otros, la sensibilidad de la gente es otra, el clima es otro… En fin: creo que uno va cambiando de acuerdo a las circunstancias y de la vida que le tocó vivir. También en el reino de los aromas. Unos que antes te volvían loca, hoy no los puedes soportar y te causan dolor de cabeza y hasta náuseas. No dudo de que sea un buen aroma, pero no para llevarlo puesto, excepto que pretendas espantar…!
Antioksidant – :
Hola ana veronica me podras decir donde lo conseguiste y de donde sos, es el perfume favorito de mi hermana y me gustaria regalarselo..
ant3755 – :
Me la compré recién por capricho porque la vi en oferta. En el frasco es rica y con presencia, pero una vez puesta es insoportable. Tiene una personalidad que, en un descuido, se come a la tuya. Se siente como repelente para mosquitos. Me arrepentí. Menos mal que la pagué barata.
leon2307 – :
años 80 y se caracterizó por crear ropa que siguiera patrones arquitectónicos o formas agresivas (similar a la línea de Thierry Mugler), basadas en cuero y colores vivos.
En partida las notas se sienten bastante florales con un dejo dulce frutoso y con flores tradicionales y con personalidad en la línea de la rosa y jazmines, más una tuberosa de fondo que da cuerpo al perfume y le da una similitud en partida muy parecida al Rumba de Balenciaga. En notas medias pierde el tono frutoso (que pudo ser una fruta neutra como el durazno o damasco) en favor de una sensación floral que recuerda a un jabón de rosas. Ya no parece haber rastros de jazmín y el aroma se concentra en una rosa tradicional densa con un fondo de tuberosa que la acompaña. Al oler por bastante tiempo hasta obtener un nivel de saturación con el perfume, las notas florales desaparecen sintiéndose frutos negros dulces (pueden ser grosellas, son menos aromáticas que una mora o ciruela) y notas especiadas sobre un fondo de madera. Al descansar por un momento y oler café para deshacer la saturación, el perfume vuelve a tonos jabonosos de rosa con tuberosa. En notas finales vuelve la fruta por encima de las flores, en tono de grosellas un poco polvosas y desaparición de la nota de tuberosa. Presenta características de chiprés al sentirse notas más maderosas y especiadas al final (después de pasar por frutas y flores), como cedro suave con tendencia a cuero y notas de tierra.
El perfume sigue un estilo de los años 80, marcado por fragancias de estilo floral intenso chiprés como Animale y Rumba. Tiene sofisticación, con la ventaja que una nota dulce frutosa no lo convierte en una fragancia exclusiva de noche e invierno, dándole un frescor apto para verano y de diario. Tiene un desplante y personalidad apropiado para oficina, sin ser molesto ni intrusivo, pero lo suficientemente notorio para marcar presencia. De noche también tiene presencia, pero en un estilo más clásico: no llamativo sensual ni vanguardista como para atraer todas las miradas al momento de hacer una entrada en un salón durante una gala, si no más bien como una fragancia bien integrada a la noche pensando en una continuación de la oficina e incluso en happy hours y reuniones de amigos. Tiene una nota romántica, aunque algo nostálgica… como un floral que proyecta la imagen de una mujer segura siguiendo el estilo