To provide the best experiences, we use technologies like cookies to store and/or access device information. Consenting to these technologies will allow us to process data such as browsing behavior or unique IDs on this site. Not consenting or withdrawing consent, may adversely affect certain features and functions.
The technical storage or access is strictly necessary for the legitimate purpose of enabling the use of a specific service explicitly requested by the subscriber or user, or for the sole purpose of carrying out the transmission of a communication over an electronic communications network.
The technical storage or access is necessary for the legitimate purpose of storing preferences that are not requested by the subscriber or user.
The technical storage or access that is used exclusively for statistical purposes.
The technical storage or access that is used exclusively for anonymous statistical purposes. Without a subpoena, voluntary compliance on the part of your Internet Service Provider, or additional records from a third party, information stored or retrieved for this purpose alone cannot usually be used to identify you.
The technical storage or access is required to create user profiles to send advertising, or to track the user on a website or across several websites for similar marketing purposes.
faircat – :
Kerbside Violet es de las pocas fragancias de Lush que me agradan.
Y como dice bien Arzacu, es una violeta diferente a todas las demás que he olido. Sin ese toque dulce a caramelos de violeta, o cosmético a polvos de arroz. La violeta de Lush es herbácea, seca, amarga, agreste, con toques de musgo y humus. Apenas detecto el toque empolvado citado en los ingredientes oficiales. Verdaderamente es una violeta salvaje, creciendo en un bosque (o un jardín muy descuidado) al pie de un añoso pino o un antiquísimo castaño. Aunque no listado entre los componentes oficiales (¿recuerdan las reseñas recientes de Oleum sobre Vetyver de Givenchy…de Josesan sobre Vetyver de Guerlain?), estoy segura de que hay vetiver entre sus ingredientes. Esta violeta es recia y masculina. Huele a flor de violeta, qué duda cabe, pero está en su forma menos floral, más terrena y maderosa. Como si una violeta se pudiera transformar en un arbusto. O como una violeta de color granate oscuro, casi marrón. Podría ser el perfume de Max el cazador en la ópera El cazador furtivo. Es tierno, pero también meditabundo y melancólico. Habla de inocencia y delicadeza, pero también de bosques tenebrosos que encierran oscuros secretos…
No estoy para nada de acuerdo con la reseña de Necano en lo referente al rendimiento de la fragancia. La duración y el sillage son impresionantes: doy fe, porque hace una semana metí una tira de papel mojada en el perfume en mi bolso y a día de hoy la funda del móvil, los kleenex y otros objetos que ahí guardaba huelen a Kerbside Violet. Sin embargo, la duración y estela no son nada chillones: es un perfume que se siente de manera distintiva, pero sin estridencias. Poca evolución en el tiempo, como otros perfumes Lush.
ds69904 – :
Es una violeta completamente diferente a todo lo que he olido, nada dulce, ni empolvada, sino terrosa, rozando el Chipre pero tan tan efímera que los 45 euros que vale el frasco pequeño se antojan una broma de mal gusto.
qvadro11 – :
Kerbside Violet es un perfume ciertamente diferente, tiene esa firma de Lush, entre artesanal y distinto, algo raro, algo “hipster” dirían algunos, personalmente me fascina!
Descubrí esta belleza gracias a un regalo la pasada navidad, me sorprendieron con esta pequeña botella de 30 ml, y qué bien me conocen ya que adoro las violetas y esta en particular dista mucho de lo que había olido hasta ahora en otros perfumes con esta nota.
Es una violeta natural, verde, helada y casi metálica… es soliflor, es decir, solo se percibe la flor… y podría decir que hasta el tallo, las hojas y la humedad de una violeta justo después de la lluvia. Tiene cierto aire vintage y sería comparable con algunas fragancias violáceas de los 70’s ya que su aroma rememora dicho estilo, un tanto fuerte en la partida para luego transformarse en una fragancia tiernamente empolvada, suave y muy duradera. Me encanta la dualidad de este aroma; primero frío, estricto y muy muy verde… luego, un poco más dulce y empolvado pero sin llegar a ser como caramelos de violeta, no, este polvo de violetas es casi salido de un tocador… tiene cierto aire a maquillaje o como meter la nariz en un cosmetiquero… suave, delicado pero persistente y con una personalidad tan propia que nunca pasa desapercibido… me da la sensación también de ciertos perfumes como “rive gauche” de YSL, o “grey flannel” de geoffrey beene (el cual atesoro en mi colección y un favorito de invierno) tiene ese tinte “helado y metálico” al inicio, lo cual la hace fresca para verano y su persistencia y secado empolvado la hacen ideal también en climas fríos…
Definitivamente notorio, he recibido elogios y también arrugones de nariz con este pequeño monstruo herbal, sin duda una fragancia no para todos, recomendable si se gusta de los aromas un tanto “oldschool”… es bastante versátil ya que personalmente, lo he usado tanto de día como de noche.
Su botella es tan simple, su diseño tan poco pretencioso y a la vez alternativo. Muy fuera de lo común, simple y se vuelve complejo al rociarlo en mi cuello y vuelve cuando piensas que se ha ido, pues te sorprende con tintes dulces y empolvados.
Una fragancia exquisita a decir verdad, original y atrapante… un tanto “hippie” por lo herbal y natural que huele… un jardín de violetas después de la lluvia… muy muy fiel al aroma real de la flor de violeta, sin adornos, sin pretensiones… solo simple pero llena de complejidades que la hacen inolvidable.
Recomiendo probarlo antes de comprar, ya que es de aquellos que causan volteo de miradas y controversia jeje…
Saludos perfumados desde Chile!