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louddyerusy – :
Se trata de toda una rareza, de aquellas no disponibles en algunas latitudes, como en Latinoamérica, quizá por su escasa rotación y poca preferencia entre el público, dada la amplia gama de fragancias que tenemos a disposición para escoger. La escasez de reseñas en este espacio así lo demuestra.
Supe de la existencia de Jules hace unos 6 años, navegando por la página web de Christian Dior, que la presentaba como un clásico relanzado, con una presentación remozada y, seguramente, con una formulación más suave, amoldada a los tiempos actuales.
Desde entonces sentí una intrigante fascinación por conocerla, como cuando se desea algo que no es nuestro, y poco importa si puede llegar a ser del propio agrado… ¡Hay que tenerlo a toda costa!
Unos meses más tarde mi hermano adquirió la versión vintage. Desde el día 1 al día 15 de espera del envío teníamos gran curiosidad y expectación por valorar, al fin, el aroma de este clásico olvidado en el tiempo.
Llegó entonces el gran día: Luego de recibido el envío, él destapó cuidadosamente el complejo embalaje, sacó la miniatura, retiró el tapón, la probamos en piel y…
Sentimos un típico aroma masculino nacido en los ochenta: añejo, con carácter animálico, especiado, turbio, ligeramente nauseabundo, compuesto por notas recurrentemente usadas en la perfumería de aquel tiempo; eso sí, no tan intenso como habíamos imaginado.
La primera impresión, inevitablemente, fue comenzar a decir “No está mal, se parece a X o Y loción que conocemos”. A veces esperas encontrar el Santo Grial en una fragancia de escasa disponibilidad; con frecuencia lo desconocido pierde su encanto una vez lo conocemos, el velo se cae, el mito se derriba y aterrizamos a la verdad.
No supuso para mí una gran sorpresa, tampoco una decepción. ¿Esperaba más de esta fragancia? Sinceramente sí.
En conclusión, Jules de Christian Dior dista mucho de ser la máxima creación de esta casa, tampoco se trata de un coleccionable obligado. Pero es un clásico que en definitiva hay que conocer, que ocupa un lugar en el mundo de la perfumería y que, aunque sea por su rareza, no es descabellado darse la oportunidad de adquirirlo.
Quizá suene trasgresor, pero Dior sabe por qué hace sus cosas.
Aroma: 7.5/10
Longevidad: 8/10
Proyección: 8/10
Versatilidad: 6/10
flarmIllupmub – :
Tengo dos miniaturas de esta fragancia que compré por ebay hace un año; la primera vez, me había gustado, pese al notable olor a algalia que emana después de 30 minutos de aplicada; de la aplicación al secado, se pueden advertir varias notas de fragancias típicas de los 80 tales como la lavanda, la albahaca, el sándalo, los aldehídos, la pimienta negra y, por supuesto, el cuero; ya por el secado, se percibe un leve olor a menta. La segunda botellita, en realidad, la compré por el capricho de tenerla.
Jules de Christian Dior es todo lo que describen sus ingredientes, y realmente es una fragancia “sucia”, pues en la fase media es evidente la nota animálica, que es más bien fecal y puede dar a muchos la impresión de pobre higiene personal, pero se hace limpia hacia el final, por la nota de menta. Debo decir que en mi piel dura unas 4 o 5 horas como mucho, y la proyección no es lo monstruosa que muchos afirman que es (yo creo que se debe al hecho de que ésta es la fórmula original de comienzos de los ochenta y de que el aroma se ha ido desvaneciendo con el tiempo; o tal vez no es compatible con mi piel, no sé.)
Es una fragancia interesante y peculiar, de momentos muy agradables, pero creo que no es muy versátil y se siente algo vieja; quizás la versión actual sea más apta para un nicho de mercado más amplio y variado. En mi opinión, el precio de esta “gema perdida” es demasiado alto como para comprar una botella, y mucho menos recomiendo comprarla a ciegas. Su calidad es incuestionable y evidente, pero no pienso que sea una fragancia imperdible.
ACTUALIZACIÓN 21 DE OCTUBRE DE 2014:
Ayer la apliqué en mi piel de nuevo, y me gustó el secado; muy ochentero, y la mezcla de jabón, hierbas, algalia y menta es muy reconfortante y nada ofensiva; si no fuera tan excesivamente cara, me haría a una botella completa.