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pdl903Diobtetty – :
Como dije en mi anterior reseña, palabras más o menos, a primeras olidas cuesta que el cerebro rompa el esquema sobre los aromas comunes utilizados en perfumería, que son con frecuencia ‘dulces, frutales, florales, amaderados, especiados’, etc. para que pueda “degustar” apropiadamente y -diría yo- con justicia a Coney Island. Si de antemano le olemos bajo el concepto “gourmand ~ notas dulces” que cabe pensar podríamos percibir al leer la composición de la pirámide olfativa, el choque puede ser aún más significativo.
También ocurre que tendemos a sintetizar… por ejemplo, hace unos días hice un pastel que gustó mucho entre los comensales, el cual aderecé (aparte del bizcocho base) con un mermelada de: piña, kiwi confitado, cereza confitada, chocolate y ron. Como les costó precisar el sabor y como tomó un tono rojo oscuro; aunque no estaban seguros, pensaron que se trataba de mermelada de guayaba jejeje 😀 Quizá fué mucha información para su paladar en ése momento, pero como estaba dulce y sabroso, la conversación y el ambiente ameno, les gustó jejeje… lógicamante. Coney Island no pienso que esté creado para gustar per se, sino para recrear una escena olfativa, un conjunto de sensaciones… bajo esa premisa, encuentro también lógico que tengamos diversas percepciones.
Ésta fragancia se llama Coney Island 🙂 y francamente, ¡me parece encantador y fascinante que otra persona refiera que percibe incluso el olor de las algas saladas! 😀 Sinceramente, no podría decir nunca que ésta experiencia olfativa es aburrida jejeje… con tan variados matices. He tenido oportunidad de probarla en mi piel y en la de otros (hombres y mujeres) y no me deja de impresionar la diversidad de matices aromáticos que puede arrojar. Por cierto, de noche, en un clima tropical-húmedo es fabulosa 😉 Claro, es comprensible que no siempre funcione bien para todos los gustos y pieles, y que encima haya quienes les parezca excesivamente caro… definitivamente, para gustos la inmensa diversidad de los colores 🙂
Por mi parte, la anécdota más reciente con éste carrusel aromático aconteció una noche de fiesta y baile latino, donde ansiosamente esperábamos (mis acompañantes y yo) disfrutar de un bar abierto de tequila jejeje… Ya iba a tono con la situación gracias a mi perfume y, al final, ¡nos salvó la noche!, porque resultó su aroma mucho más delicioso y “tequiloso” que el del licor de pésima calidad que nos sirviron ésa noche (un chasco total)… en fin, no nos quedó otra más que reírnos, pagar por otras bebidas aparte de la entrada, y disfurtar del baile 🙂 … Coney Island estuvo maravilloso e hizo gala de una excelente fijación, como de costumbre 🙂
En mi caso, dependiendo del clima, de mi humor, etc., hay momentos en que noto algo más las notas dulces, en otros más el limón, en otras el licor, en otras la sal y las referencias marinas. Pero en todos los casos, siempre con una notable calidad en longevidad y en lo realístico de los aromas.
palkan18 – :
Qué onda con este perfume? Es en serio? No puedo superarlo, es realmente terrible. Por lo general, soy bastante tolerable con las fragancias, he de tener una o dos reseñas negativas solamente.. pero con este, simplemente no puedo evitarlo.
Empieza con un olor acuático y salado muy denso, me recuerda mucho al olor de las algas marinas, las cuales las tengo asociadas o a un rico sushi o a salir enredada en ellas cuando solía bucear, pero en un perfume.. no, gracias. Además de eso, muchísimos cítricos y se puede notar el olor a tequila, bastante curioso aunque desaparece después de un ratito.
Decidí esperar un buen a ver si cambiaba, seguían notas gourmands y pensé que quizás eso salvaba el perfume, sin embargo, lo salado-marino-feo siguió y siguió, el perfume se volvió un poco dulzón eso sí, pero ni rastros del chocolate, caramelo y canela, no cambió más después de eso. Así que salida: fatal, fase media: mala, base: aburrida. Entiendo que hay perfumes que no te gusten a la primera y que tienes que encontrarles el lado, perfumes difíciles.. complicados, pero para mi, esos los representan aquellos exóticos, orientales pesados, árabes, o incluso vintages y animálicos muy fuertes… pero con éste que no me ha gustado, un perfume acuático, con notas gourmands mal logradas y encima carísimo, no pienso perder el tiempo.
roman1978270178 – :
Seductora la anterior reseña de azuriiita, como ya nos tiene acostumbrado. Yo probé esta fragancia primero que ella, y sigo pensando que las “narices” de FRAGANTICA.com se han “posado” en la fragancia equivocada (me refiero a la New Harleem), pienso que Bond no 9, presenta otras posibilidades distintas a la New Harleem (que os confieso, sigue sin gustarme, pero pienso volver a probarla hoy, lo prometo).
Ciertamente estamos ante una fragancia que sin ser una masterpiece, tiene su encanto, es basicamente una fragancia para cocktail, para irse de rumba (reventon, fiesta, etc..), la asoció a esos encuentros en los restaurantes y bares de hoteles 5 estrellas, de los que tanto me ha gustado ir, y disfruto cada vez ese ambiente.
También opino lo mismo que azuriiita, que las notas cítricas y alcohólicas, opacan las notas gourmand en esta fragancia, pero es su sello, yo supongo que Bond no 9 también tendrá otras fragancias (no de las 16 diferentes que he probado), donde este balance se invierta.
El que no este prejuiciado sobre Bond no 9 (recuerden que básicamente, la mayor queja hacía esta marca es su precio, y su relación costo-calidad), disfrutara esta fragancia, que por cierto, considero más femenina que masculina (según mis estándares personales).
Bifeobece – :
Esto no es para todos los cerebros… ¡ja!
Lo compré a ciegas, pese a las contradictorias reseñas que leí en fragrantica.com (muchas de ellas negativas), porque me intrigaban mucho sus notas… parecía que sería una fragancia divertida, diferente… y suponía que al tener canela, vainilla, caramelo, chocolate, guayaba… sería más dulce… pero no; al menos, no en mi piel.
Lo primero que tengo claro es que evitaré usarla en los días que ande muy sensible, porque no quisiera embriagarme con su tequila 😀 ¡Su salida es impresionantemente tequila con sal y limón verde!!!!!, como si bebiese de un tirón 4 o 5 caballitos jajaja Tampoco es un aroma que me parezca adecuado usar en ambientes de encuentro con mis jefes o figuras de autoridad, ni en ámbitos en los que tenga que proyectar una imagen de seriedad… ¡no sea que piensen que anduve tomando! jajaja
Por otro lado, sucede que la intervención del almizcle y la vainilla (con el cedro, supongo) generan una especie de aroma “ahumado” ligero, como el que se desprende de los cigarrillos light jajajajaja
Cuando pasa la vestisca tequilera 🙂 queda en la piel un aroma de limon suave (no los típicos cítricos) combinando con un aroma entre dulce y salado. En ese instante, es cuando -en mi opinión- Bond nº 9 logra su cometido: ¡me siento como si estuviese sobre un muelle! … la brisa sopla fresca, trayendo aromas de chocolates y caramelos… ummm provoca comerlos. Sí, éste perfume da ganas de comer golosinas.
He decidido utilizar éste perfume con una crema de vainilla_chocolate, para reforzar un poco éstas últimas notas, que me gustaría disfrutar más, a la vez que neutralicen un poco las notas de tequila y limón.
De que es una experiencia olfativa interesante, ¡lo es!… sale de lo común completamente. A medida que lo voy utilizando, que mi cerebro lo ha comprendido, y ha roto con el “esquema” precognitivo de cómo suelen oler los perfumes, nos vamos entendiendo mejor, y me agrada más.
Pensé mucho en los comentarios de la gente que afirma que le huele a vómito… tal vez les traiga recuerdos de alguna mala borrachera 😀 Pero en todo caso, un aplauso para Bond nº 9, por éste perfume capaz de recrear sensaciones tan vívidas y particulares.
Pienso que es fabulosa para el uso al aire libre, siento que se expresa mejor. Para lugares cerrados no me da tan buen ‘feeling’ 🙂 Eso si, en todo momento me transmite sensaciones de comodidad, de estar agustoooooo jajaja