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botanic1 – :
Pues me toca inaugurar esta bonita fragrancia… Porque sí, es muy bonica y rebosa dulzura.
Es de mencionar que ha sido un regalo para una personita, ya no tan pequeña pero sí adorable.
Comencemos pues, un tarrito blanco opacado
con acabado polvoso, coronado con un tapón de peluche ya pinta bien. (Y si encima lo pilláis con caja regalo y peluchete…)
Pero pasemos a este juguito, que se resume en el olor de una caja de bombones (concretamente a la Caja Roja). La entrada de vaina de cacao es ese olor que flota hasta tu nariz cuando empiezas a desprecintar la caja, sabes que llega dulzura y te vas preparando… Se te hace la boca agua y empiezas a pensar que bombón escogerás… Finalmente, La abres y el olor de la almendra se mezcla con el chocolate con leche, cual bomboncito crocantini.
La verdad que es un gourmand súper inocente y muy dulce, pero no por ello lo tacharía de infantil. Un punto a favor es que no tiene alcohol, por lo que su uso no es recomendado únicamente para los más peques, si no para pieles sensibles, atópicas, de fácil irritación o simplemente para tomar el sol (siempre con mesura en esa situación por favor!)
Su evolución es muy suave, va cambiando con transiciones discretas, manteniendo su esencia chocolatera de principio a fin. La estela y duración son bastante destacables para el tipo de fragancia que es. Aguanta toda la jornada escolar con ímpetu (6 horas), y a pulso te ganas el que te llamen bomboncito, porque desde luego que hambre de dulce se despierta en todos los que te rodeen.
En definitiva, una buena opción para los chocoladictos de cualquier edad y sexo, es totalmente unisex. Además, le veo bastante salida para poner en capas combinándola con alguna cereza a lo Mon cherie, un cítrico que le dé chispilla y algo de aire… La verdad que se me ocurren bastantes combinaciones, pero mejor que cada uno experimente hasta encontrar su bomboncito particular.